(To read in English, click here.)

Cada Año Nuevo pensamos en el año pasado y hacemos propósitos para que este año sea mejor que el anterior. Comenzamos a hacer ejercicio, dietas, queremos pasar más tiempo con la familia, etc. El problema con todos estos cambios tan precipitados es que van en contra de una fuerza muy grande; la fuerza del hábito y de la rutina. Como seres humanos, amamos la rutina, y cada rutina lo que hace es reforzar el hábito. Como dice el refrán, los malos hábitos son duros de romper. ¿Pero, cómo podemos romperlos mas fácilmente?

A traves de mi experiencia, está en: reemplazar un mal habito por uno bueno. Cuando digo bueno y malo me refiero a los hábitos que benefician su vida y a los que la dañan. El secreto está en substituir el mal hábito lentamente, o poco a poco y no de una sola vez.

Pero más bien nos debemos preguntar por qué creamos estos propósitos. Lo que he observado es que no somos completamente felices o no estamos en paz con la vida que tenemos, por lo tanto queremos tener una mejor vida. Pero al quererla hacer mejor pensamos que vamos a alcanzar la felicidad y la paz interna. Sin embargo, en la realidad la felicidad y la paz interna no vienen por algo de lo que usted haga, pero si vienen de la perspectiva que usted obtenga a traves de la vida y de experiencias. Entonces, ¿como obtenemos esa perspectiva?

Primero, mire la manera en que usted vive su vida ahora. ¿En este momento, ve usted su vida bastante mala, algo insignificante o como un milagro hermoso? Asumamos por un segundo que usted ve su vida bastante mala, ¿que significa eso?

Eso significa que sus ojos han sido programados y siguen programados para ver lo negativo en todo lo que está alrededor de usted. Así pues, utilicemos un ejemplo… Visualice un lago con árboles, flores, ranas, pescados, serpientes, y el sol que lo rodea. En su mundo malo, usted percibirá muy probablemente esta visión como incómoda y horrible. ¿Que verá usted? Usted verá muy probablemente que las flores atraen abejas así que puede ser picado y ademas es alérgico, que las ranas son babosas y que harán demasiado ruido con su famoso croac. Que las serpientes son demasiado peligrosas y venenosas. Que el lago tiene basura, el sol es demasiado brillante y usted olvidó sus gafas de sol, así que usted se queja. Al mismo tiempo, usted verá que los árboles proporcionan demasiada sombra y que sentira frío ya que olvidó su suéter y otra vez usted se queja. Usted verá que los pescados no tienen a donde ir y están estancados en ese lago y no libres como lo pudieran estar en el mar.

Si usted ve su vida como algo insignificante y usted se encuentra desinteresado, usted percibirá muy probablemente el lago en el ejemplo anterior como otro lago. Usted ni siquiera va a notar las flores, las ranas, las serpientes o los pescados. Los lentes de sus ojos se han programado para bloquear cualquier cosa que sea llena de vida.

Incluso si alguien le dice:, “mire esa hermosa flor,” usted puede decir: “que más da, es una flor. He visto centenares antes.”

Ahora, si usted ve su vida como un hermoso milagro, entonces usted percibirá muy probablemente el lago, los árboles, las flores, las ranas, los pescados, la serpiente y el sol como fenómenos y bendiciones. Usted estará agradecido por cada organismo vivo y verá su valor e importancia en su vida. Verá que nada es insignificante y estará agradecido por todo lo que le han dado y no le han dado. Usted esta feliz. Esta percepción es lo que en los principios del yoga se trata de inculcar a cada practicante. Nosotros, como yoguis, observamos donde estamos ahora y sabemos que hay una manera más feliz, más pacífica de percibir la realidad, acondicionamos nuestras mentes para percibir la realidad de esa manera.

Ahora, usted puede decir, “pero no es esto otra falsa ilusión? No sera que estoy percibiendo esto con un lente más feliz?” Sí y No. De acuerdo con el Yoga Sutras de Patanjali (Aforismos de Yoga de Patanjali), esta manera de percibir la realidad es realmente la manera verdadera en que la vida fue hecha para ser experimentada. En nuestro estado natural, nosotros no fuimos creados para sufrir. Pero como seres humanos traemos el sufrimiento nosotros mismos por las maneras que nos vemos y como vemos el mundo. Como en la interpretacion de los Yoga Sutras hecha por Swami Satchidananda dice: “no hay nada mal con el mundo exterior. Usted puede hacerlo un cielo o un infierno.”

Ahora, si nos encontramos apegados a esta bella percepción y juzgamos a los otros percibiendo la realidad de una forma diferente, entonces hemos perdido nuestro camino en algun lado y necesitamos  reconsiderar nuestra verdad.

¿Usted ve que la creación mental de cómo percibe la realidad va a cambiar los colores de su experiencia cada vez, cada momento, y diariamente? Cambie el color de sus lentes y usted verá más claramente y estará en paz! Continúe con los propósitos que hizo al principio del año, pero con una nueva perspectiva en cómo usted ve ese propósito. La paz está siempre dentro de usted; usted tiene que quitarse suficientes capas de falsas percepciones para ver la verdad claramente. ¿Quién está listo para descubrirse?

______________________________________________________________________________