Bandhas. Amplifican tu vida sexual, transforman tu práctica de yoga y te hacen sentir vivo y lleno de bondad en tu interior. En pocas palabras, hacen todo mejor.

Entonces, ¿Que significa esta palabra extraña, por cierto?

Los bandhas son bloqueos o cierres energéticos sutiles, que funcionan con la participación de ciertos músculos del cuerpo para sellar la energía. Al hacerlo, no sólo regulan y equilibran tus sistemas internos, sino también reponen tu energía desde el interior y mejoran cualquier rendimiento.

Existen varios bandhas, algunos de ellos son más extremos que otros y son para pranayama (ejercicios de respiración) o asanas (posturas) más avanzadas. Pero los bandhas más sencillos y básicos son con los que todos nosotros debemos familiarizamos. Se pueden hacer en cualquier lugar, están disponibles para todos y a menudo tienen un efecto muy, muy profundo de una forma muy sutil.

El primero es mula bandha, o ‘cierre raíz’. Es una suave elevación desde el suelo pélvico hacia arriba. Imagina que estás en un coche atrapado a una hora punta de tráfico y necesitas urgentemente usar los servicios higiénicos. En este momento los músculos de mula bandha son los que están participando. Esta técnica permite canalizar estas sensaciones pero sin la angustia y la incomodidad de estar a la hora punta de tráfico y sin acceso a un baño.

El segundo es uddiyana bandha. Uddiyana significa literalmente ‘vuelo ascendente.’ Piensa empujar desde la zona baja el ombligo hacia la columna vertebral y sigue ascendiendo. Básicamente, se levanta el ombligo hacia arriba y empujas hacia adentro y ya tienes tu manera de experimentar este bandha. ¿Ya ha sentido su pecho más abierto y su postura mejorada?

Al hacer posturas de yoga en series tradicionales, hay tres cosas que son fundamentales para la práctica: bandhas, aliento y dristi (mirada suave y fuera de foco).

Entonces ¿cómo es que algo tan fundamental para cualquier práctica de yoga es a menudo pasado por alto? ¿Es porque nosotros, los profesores de yoga, no nos atrevemos a utilizar las palabras “músculos de baño” o “órganos sexuales” en clase? O tal vez es porque muchos instructores se apartan de las dimensiones sutiles de energía y siguen con las explicaciones más cómodas orientadas hacia los aspectos físicos del yoga.

¡Basta, ya! ¡Vamos todos a hablar de nuestros músculos y órganos sexuales! ¡Usemoslos ya, fuera y encima del tapete!

Ten en cuenta que los bandhas no tienen que ser una experiencia extrema, ni ser solo usados en una clase de yoga. Imagina el yogi Ashtangi con el estómago tan arriba y hacia adentro que ni siquiera pueda verse, o un doble mentón (jalandhara bandha) que es tan poco atractivo que nunca te atreveras hacerlo delante de una sala llena de extraños. El extremismo de estos casos en estos cierres de energía, es completamente válido y beneficioso sin embargo lo que queremos destacar aquí es que los bandhas son para todos y pueden beneficiar aún a los más inflexibles o no yogi entre nosotros.

En el Ayurveda, el acoplamiento de los bandhas se considera como la fuente interna de la juventud. Me preguntaba si alguna vez encontraríamos eso hasta que por fin lo conseguimos. Pues como es sabido por nosotros los yogis, las mejoras cosas se encuentran en el interior de nosotros mismos y no por fuera.

Pruébalo por ti mismo.

Siéntate cómodamente en una posición erguida, con la espalda recta. Al inhalar, imagínate que entra la respiración por la parte superior de la cabeza, bajando por la columna vertebral, enganchando por debajo del coxis y después levantando del suelo de la pelvis (músculos sexuales involucrados), empujando hacia dentro y hacia arriba del ombligo. Mantén la respiración en la parte superior, con los bandhas en uso, y a continuación, suelta todo completo. Hazlo 10 veces, alargando la columna vertebral, y siente como todas tus energías se reponen y disfruta de la sensación al soltar todos los bandhas al exhalar.

Esto es realmente una gran manera de empezar cualquier día. Pasamos gran parte de nuestro tiempo gastando energía. Con nuestros hijos, en nuestros trabajos, con nuestros amigos, con nuestros amantes, pensando en el idiota que nos cortó, etc. Sigue estos 10 respiraciones por día como un refugio para ti mismo, revitalízate por dentro, y reconoce que lo que te tienes que dar a ti mismo es en verdad el mejor regalo de todos. Si usted tiene una práctica de yoga, comience a concentrarte (ya sea por vez primera o como es de costumbre) en estas áreas para sentir y ver unos cambios espectaculares. Puedes preguntar a cualquier profesor de yoga sobre exploraciones y explicaciones más profundas.

Sea paciente.

Tómese el tiempo necesario para conocer a esas partes de ti mismo. Dale a los bandhas la oportunidad de brindarte un efecto duradero y real. Con el tiempo llegarás a un acuerdo entre las energías que tienes para dar y las que necesitas recibir. Te darás cuenta de lo mucho que estos cierres de energía mejoraran cualquier rendimiento deportivo, así como hacerte sentir más sensual y sobre todo segura. Al igual que cualquier afrodisíaco, los bandhas permitirán sentirte estimulado y relajado al mismo tiempo.

Lo que me lleva a mi punto al decir que los bandhas son de hecho muy, muy sexy.

Jessica Cartwright tiene una vida dedicada al desarrollo del guerrero espiritual que cada uno lleva adentro. Ha pasado muchos años tocando las vidas de otros a través del yoga, recorridos de meditación guiada y la energía de sanación. Jessica posee el don de ayudar a otros a reconocer y alcanzar sus leyendas personales, alcanzando su máximo potencial a través de todas las formas de exploración personal. En su organización, VivaMyYoga.com, Jessica ofrece la enseñanza de yoga bilingüe (Español / Inglés), trabaja con muchas ONGs y organizaciones sociales. Ayuda a organizar retiros de yoga tanto en su ciudad natal, Bozeman- Montana, así como a nivel internacional.

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Assist Ed: Sara Crolick/Ed: Kate Bartolotta